26 febrero 2010

Comentario Editorial

En fechas recientes fui increpado por una de las escasas, aunque muy apreciadas, lectoras de este e-zine. El cuestionamiento iba en el sentido de que, por qué hasta ahora sólo se han hecho reviews de bandas o artistas femeninas. Conservando su identidad en el anonimato pero citándola: “... ¡necesito más testosterona!”. Bueno, podría ponerme Freudiano y hablar sobre conceptos como “La envidia de pene”, pero entonces me arriesgo a perder la fracción feminazi de lectoras, y de momento no nos podemos dar esos lujos. En su lugar, como siempre, me voy a atener a los hechos duros... sin albur ni implicaciones Freudianas.

Quiero empezar por decir, que no es ninguna coincidencia, la redacción está perfectamente consciente desde la planeación de este blog que, hasta la fecha, y la gran mayoría de los que están por venir, son reviews de bandas femeninas o lideradas por mujeres.
Esto es resultado directo de la depresión por la que ha atravesado el Rock en la última década. Como cito en el Manifiesto del Rock-noRock, señalo a 1998 como “el año en que todo se fue a la mierda”.

Desde entonces, han sido muy escasas las bandas que -realmente- podamos llamar Rock. Por el contrario, ha sido el Pop el que ha ido usurpando los terrenos antes ocupados por el Rock. En este aspecto particular, el papel de las bandas masculinas es verdaderamente patético.
Como planteo en el Manifiesto del Rock+noRock, en más de doce años, no ha nacido una sola banda que le llegue a los talones a los monstruos de décadas pasadas. A menos claro, que pretendan comparar a Linkin Park con Led Zepellin, a Coldplay con Iron Maiden, o a la bandita Indie de su preferencia con Nirvana, cosa que me parece francamente majadera, digno de alguien que no tiene ni la más elemental noción de la historia del Rock, y sin embargo sucede cada vez más a menudo.

Entre los rockeros de verdad y los que sólo fingen, no es popular decir que el Rock está en la lona; pero estos sujetos no acompañan su negación sistemática de la realidad con evidencia incontrovertible que respalde su punto de vista.

Aclaro que no guardo rencillas contra el Indie, después de todo el así llamado, Indie Rock, me rescató de quedarme “forevereado” en los noventas, como muchos que aún no se han dado cuenta o no lo quieren aceptar. Pero a estas alturas el Indie está muy gastado, si es que alguna vez fue sólido, considerando que el Indie se quedó muy, muy, pero muy lejos de alcanzar los niveles de influencia que tuvieron el -mal llamado- “alternativo” o el New Wave, por citar sólo dos.
Actualmente, me refiero al Indie (ya ni empecemos con el emo) como “Rock Castrado”. Siéntase libre de citarme.

Por otro lado, las bandas femeninas* del mismo periodo me resultan recalcitrantes, muestran una gran variedad de matices musicales, riqueza de géneros interpretativos y propuestas de imagen muchísimo más originales que sus contrapartes “masculinas”.

*Y por lo que más quieran, entiéndase que aquí ¡OBVIAMENTE no me estoy refiriendo a las falsas nuevas divas del pop!

La opción es quedarse forevereado con las bandas y las glorias de décadas pasadas y por lo tanto envejecer, o adaptarse con gracia y bombear de aguas profundas los últimos yacimientos de música rock (o NoRock) existentes.

Por lo que a la testosterona corresponde, creemos firmemente que muchas de las músicos revisadas en este blog, tienen más testosterona en un ovario que Fall Out Boy y Green Day todos juntos.

Citando a Jerjes, el conquistador Persa: “Parece que mis mujeres se están convirtiendo en hombres y mis hombres en mujeres”, refiriéndose a la capitana de fragata Artemisia, quien combatió con fiereza a la armada Ateniense, mientras que el resto de su flota huía con el rabo entre las patas.

Lo que estoy diciendo es que, no consideramos que las bandas masculinas nacidas en los albores del nuevo milenio sean lo suficientemente “hombres” para cumplir con los estándares Rock de este e-zine. Cuando los “rockeritos” hagan acopio de huevos, serán bienvenidos en este blog, mientras tanto, su participación será muy limitada.
Como yo lo veo, el déficit actual de huevos en el Rock, es similar en volumen, al de la ayuda humanitaria mandada a Haití, así que no será fácil.

Por todo lo citado anteriormente, creemos que las bandas o artistas femeninas ostentan con mucha más dignidad, respeto y actitud el estandarte del Rock.

No negamos la posibilidad de que existan bandas masculinas dignas, así como tampoco negamos la posibilidad de vida en Marte. Es sólo que, llevo varios años explorando bandas por mi cuenta, off-mainstream, y las únicas que encuentro divertidas u originales resultan ser de mujeres. Casi todas las bandas “masculinas” con las que me he topado, me incitan más a hacerme una manicura que a romperme un ladrillo en la cabeza.
¡ESO NO ES ROCK!

El Rock es para los HOMBRES (… y las mujeres pues, se entiende ¿no?) ¡no para los nenas y las princesas! (sic).

Si nuestra groupie, nombre código: Rosalba, o cualquier otro lector(a), tiene alguna aportación de alguna banda de hombres-hombres que se adecue a los límites y el concepto del blog Rock+noRock, es decir, que no me provoque sacarme la ceja, háganoslo saber y prometemos que será revisada y considerada para su posible inclusión.

Despido esta disertación con un sonoro pero respetuoso... ROCK ON, BITCHES!


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23 febrero 2010

Las Esposas de Mr. Roboto

Robots in Disguise
Robots in Disguise

Mini Bio
Particularmente difícil se me hace ubicar a Robots in Disguise en un campo semántico, así que vamos a dejarlo en que se mueven fundamentalmente dentro del Electro-clash, que es una forma inspirada en el Punk, pero basada en sintetizadores y muy compatible con la pista de baile.

Aunque las Robots se desempeñan principalmente en la escena británica, sus orígenes incluyen Berlín y Londres, de donde son originarias Delia Gaitskell y Suzanne Powell, respectivamente y que, como proyecto no de año nuevo sino de nuevo milenio, forman Robots in Disguise en 2000; producidos por Chris Corner, de Sneaker Pimps y que también tiene un acto solista llamado IAMX, que probablemente revisaremos más adelante.




La banda produjo 3 álbumes, destacando el “Get RID!”, de 2001. En proceso de grabar un cuarto disco, se quedaron sin dinero, así que para financiarlo, por curioso que parezca, están organizando su propio teletón desde 2008, aceptando contribuciones en su sitio web.

Robots in Disguise
Informe
No está claro de dónde sale el nombre de Robots in Disguise, aunque es un hecho que no está relacionado con Transformers (por más que el atarantado motor de búsqueda de Wikipedia lo sugiera), es obvio que ese mote resulta muy atractivo para los pósters que anuncian la alineación de bandas en los clubes de la escena europea.
Como ya se mencionó, Robots son una de esas “bandas de club”, con un entretenido y energético performance en la tocada en vivo y para pequeñas audiencias.

Su música no cae en complicaciones y pretende solamente divertir, teniendo como temas principales en sus canciones: la cruda, el delirium tremens, la vida nocturna y su mala experiencia con la industria disquera, visto con una muy buena actitud.
La ironía en sus letras y en general en todo su acto, nos indica que no se toman muy en serio a sí mismas, lo que es refrescante, después de haber aguantado una década de banditas de rock compuestas por castrados que se quieren hacer los rudos.
Evidencia de esto está en temas como “We're in the music biz”, una sátira de sí mismas y la industria en general; tema del que, en una observación más profunda, probablemente toman su nombre, considerando el siguiente verso:

Robots in Disguise
"Dress up as robots in Soho hid outside the BBC
to plug our cd to a DJ
Do you wanna be on my show yeah!
We chuck glitter in your eyes and pull out lasers, open fire!
Stalk the journos round Reading we got tagged in your mag as Britains worst band
Absolutely no talent, the most unsuccessful duo the UK has never known yeah"

¡Tienen que amarlo!

Dictamen R+nR
A diferencia del grueso de bandas, que tienen aspiraciones de grandeza, creo que las Robots in Disguise son felices siendo las reinas del circuito de jóvenes que les gusta mezclar polvo de ángel con Red Bull.
Es evidente que, a estas alturas, la crítica especializada no las tomará en serio jamás, sin embargo, se han ganado un lugar entre los fans del círculo antrero londinense, con temas como “Can't stop getting wasted” y “The Sex had made me stupid”* que, por decir lo menos, están hechas para generar empatía entre su audiencia.

*La alta gerencia de R+nR aclara que lo que deja estúpido no es el sexo, sino la sífilis.



Incluyo videos de bajo presupuesto (no tienen de otros) de “DJ's got a Gun” y mi recomendación personal “Turn it Up” que, es incongruente con el resto de su producción, pero es de mis sencillos favoritos descubiertos en 2009, una pieza perfecta de electro-punk en lo que a mí respecta; además se pueden ver algunos de sus desfiguros en el escenario.
No me encanta la idea de incluir en un review, un cover hecho por la banda en cuestión pues, yo digo “¡así serás bueno! haciendo covers”, pero este en particular me parece un aporte original. Se trata de “You really got me”, de The Kinks.

You Really Got Me, Robots in Disguise


Tampoco adoro saturar cada artículo con vídeos pero, no podía dejar pasar este que me parece excelente, “We're in the music biz”... por si a alguien le interesa empezar una banda.



Para terminar, me enorgullezco en reportar que la anterior, es la semblanza on-line más completa de esta banda que se puede encontrar. Si encuentra una mejor... bien por usted.


Fe de errata: Resulta que una canción poco conocida es “Transformer”, así que la liason entre el nombre de la banda y el slogan original de la línea de juguetes de Hasbro está en entredicho... yo, que no creo en coincidencias, estoy confundido.

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19 febrero 2010

Martina y su topil

Marina Topley-Bird
Martina Topley-Bird

Mini-Bio
La mayoría de los artistas reseñados en este e-zine tienen muchos motivos para estar resentidos con la vida. Yo opino, y dichos artistas estarán de acuerdo, en que han colectado menos fama de la que les correspondía. Esto, considerando que MTV y las listas de popularidad están llenos de sujetos cuyos talentos son más que cuestionables.
Entre ellos, si alguien merece estar hecha una furia, esa es Martina Topley-Bird.

Aún adolescente, fue reclutada por Tricky, un raperito callejero británico auto promovido a trip-hopero. Para entonces, Tricky ya formaba parte de la gruesa alineación de Massive Attack y gozaba de las mieles del éxito pero, teniendo una voz parecida a la de un gangoso muy resfriado y recién levantado, sus opciones como solista eran muy limitadas.

Antimatter, Tricky


De tal suerte, Martina Topley se convierte en la pareja sentimental, voz e imagen del aclamado álbum solista de Tricky, Maxinquaye, 1995. Martina es vocalista líder en la mayoría de las canciones, sin embargo todo el crédito va para Tricky. El insulto final vino cuando por error de imprenta, en los créditos del disco es mencionada como “Martine”.

Martina Topley-Bird
La relación profesional y personal con Tricky se prolongó en los mismos términos por dos álbumes más, que no corrieron con tanta suerte. El ego de Tricky se desbalanceaba cuando intituló su segundo proyecto “Nearly God”. Con participaciones de Björk, Neneh Cherry, Allison Moyet (de Yazoo) y la misma Martina en las vocales. Yo definiría este disco como música para ermitaños... si no se es uno, probablemente terminará así escuchando ese tipo de música. Es un álbum deprimente (en el buen sentido) y muy obscuro cuyo éxito comercial fue negativo.

Martina Topley-Bird
En 1998 el affaire Martina-Tricky termina, hijo de por medio. Le tomó a Topley-Bird más de 5 años reiniciar una carrera por su cuenta por su cuenta con Quixotic, 2003, y posteriormente The Blue God, en 2008.



Informe
Aunque es elemento primordial y fundador de Massive Attack, Tricky siempre me ha parecido un artista muy sobrevaluado. En sus proyectos personales, las únicas canciones que valen la pena son las que soporta Martina Topley-Bird. Es justo asegurar, que sin ella Tricky no tendría un nombre por su cuenta.
Comparando talentos mano a mano, me parecen mucho mejores los álbumes de Martina que los de Tricky en solitario, por mucho.

Incluyo en este reporte “Antimatter”, que ni si quiera se incluyó oficialmente en el Maxinquaye. Esta rola la programaban en radio sólo después de media noche, ahí donde ponían las rolas sin dueño y los locutores ya no decían los títulos. Al más puro estilo de la era previa al internet, tarde varios años en saber quién tocaba esta canción, que es mi favorita personal de la colaboración Tricky-Topley-Bird. Una versión muy mala, gruñida más que cantada por Tricky, fue incluida en Vulnerable, 2008. Consideren ésta edición con la voz original de Martina, un garbanzo de a libra.



Incluyo también el segundo sencillo del Maxinquaye, “Hell is round the corner”. Un corte que es la quinta escencia del Trip-Hop y por lo único que le doy crédito a Tricky. ¡Esta sola canción definió ese popular aunque fugaz género!

Hell is Round the Corner- Tricky


Dato curioso: La que a la postre sería reconocida como la banda más representativa del Trip-hop, Portishead, incluyó un cínico sampleo de Hell is Round the Corner en su canción pero, mientras que la versión de Tricky fue relegada a la programación de media noche, la “apropiación” de Postishead se estrenó unos meses más tarde, cuando el ambiente era más propicio para música deprimente (en el buen sentido), además era ligeramente más amigable y fue un éxito del álbum Dummy.
Tricky demandó por regalías, pero nunca supe en qué terminó el alegato. Supongo que se sintió un poco como la Topley-Bird.

Para ver en acción en vivo a Martina les dejo Poison, de sus últimos sencillos y como es costumbre también, el único vídeo decente que pude encontrarle porque no hay mucho de dónde escoger, Anything, de su álbum debut.



Dictamen Rock+noRock
Detrás del moderado éxito, incluso la permanencia de Tricky como solista, está Martina Topley-Bird. Aunque la relación con él es innegable, el estilo de Martina se aleja mucho de las complejidades emocionales y formales del Trip-Hop, para lograr un carácter muy original que, en mi opinión podría con el tiempo superar al del mismo Massive Attack, banda con la que por cierto colabora en su última edición, Heligoland, estrenado hace un par de semanas.
Martina “martine” Topley-Bird cuadra a los oídos de aquellos que gustan una amplia variedad de interpretaciones y matices en un mismo artista.


Martina Topley-Bird es No-Rock
… y Tricky es un abusivo

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16 febrero 2010

Alicia en el País del Punk

Alice in Videland
Alice in Videoland

Mini-Bio
Ahora que se ponen de moda las Alicias Pervertidas:
Alice in Videoland, de origen sueco, se compone de la vocalista Toril Lindqvuist y Carl Lundgreen y toma su nombre de un videojuego hecho para la Commodore 64, aquel primitivo computador que, por un momento en los ochentas, nos dio la esperanza de que el futuro cercano podía ser mejor.
Esta banda, nacida como un experimento sin mayores pretensiones, pero teniendo un acto en vivo destacable, logró cierto reconocimiento dentro del circuito escandinavo de tocadas y festivales a principios de la década, hasta sacar su primer álbum, Maiden Voyage en 2003.

Alice in Videoland- She's a Machine



Informe:
Alice in Videoland toca una especie de electro-punk, pero desmarcándose de los manifiestos políticos usualmente asociados a bandas del género. Para darse una vaga idea de a qué puede sonar esto, digamos que si tomáramos a The Human League, se les metiera en una jaula por 30 días, se les alimentara solamente con alimento procesado lleno de hormonas animales y se les hostigara con agujas eléctricas por las noches, al final saldrían tocando un synth-pop bastante violentado, pero sin la formalidad del industrial o el EBM; al contrario, apuesta por la ligereza lírica del pop.


Alice in Videoland

Por sus inicios, y porque así son las bandas escandinavas, se puede anticipar que Alice in Videoland será una banda IKEA. Probablemente nunca trascienda más allá de la progresista escena escandinava ya que, como es sabido, el conservador público norteamericano es poco proclive a aceptar propuestas de la vanguardia europea; que a estas alturas siguen pensando que el happy-punk es muy trendy el nu-metal muy rudo y el indie es el nuevo alternativo.

La frecuencia en la que se encuentra Alice in Videoland es amplia, como en la que se puede encontrar cualquier banda de punk-rock. Hay variedad de glam-rock, power ballads y algunas chillonas de electro-pop.

Alice in Videoland
No pierdo oportunidad en manifestar mi desprecio por el adelgazamiento del punk o cualquier otro género en estos últimos años pero, yo digo, si de todas maneras se van a hacer reinvenciones pasajeras del Punk original, por lo menos que la vocalista enseñe la pancita ¿no?

Se incluye en este reporte, In Denial, corte que tal vez sea poco representativo del repertorio, pero es mi favorita personal. En contraste, anexo el único vídeo decente que les encontré, Bad Boy, aunque no es de mis preferidas, es una buena carta de presentación a la banda.



Otros sencillos recomendados por la gerencia son: Falling, Emily, She's a Machine y Stuck in my Vision.


Dictamen R+nR:
Alice in Videloland por su cercanía al industrial, equivale a tomarse una pepsi kick de Hidalgo (eso dicen). El único nicho de posibles escuchas donde se me ocurre acomodarlos, es en el de los fans de películas de zobies. Fuera de eso, le pueden ajustar -o no- a cualquiera. Por algún motivo, a los suecos parece encantarles esta banda como soundtrack para sus vídeos de snowboarding.

Alice in Videoland es No-Rock.

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12 febrero 2010

Evasión Lunática

Lunascape
Lunascape


Hace tanto tiempo que debí empezar este proyecto, casi un año, que ahora me encuentro con que lo que me gustaba hace un año, hoy día ya no me gusta tanto. Lo cual considero que es bueno pues, uno de mis mottos es “adaptarse o envejecer”.

Quería que el primer post correspondiera a Lunascape, que encontré hace un año y en parte inspiró este blog, pues desde Ladytron, hace algunos años, no me topaba con una banda que me gustara tanto.
Claro, eso fue hace un año, y aunque me sigo sintiendo muy satisfecho de este descubrimiento, actualmente ya no es tan representativo de mi gusto.






Mini-Bio:
Lunascape es originario de Bélgica, formado alrededor de 1997 y liderado por la vocalista Kyoko Baerstsoen. Antes de ser conocidos (… ¿conocidos?) como Lunascape, se llamaron Calyx, nombre al que renunciaron para no ser confundidos con la banda británica drum & bass del mismo nombre.
Estando Lunascape en fase de boceto, Kyoko entró como vocalista invitada emergente para la banda compatriota Hooverphonic en 1997, cuando la vocalista original, la que cantaba 2Wicky, abandonó la gira recién iniciada del primer álbum.

El primer álbum completo de estudio, Reflecting Seyelence, llegó hasta el 2003. Algo remarcable de ese álbum, fue que Rhys Fulber, productor de Conjure One, produjo el cover Tears from the sun, para ser interpretado por la conocida fan from hell del finado papa Juan Pablo II y ahora sacerdotiza neurótica, Sinead O'Connor. Para mayor referencia, Fulber es conocido como el titiritero detrás del proyecto Delerium, que a finales de los noventa fue muy popular entre niñas Ibero que pretendían hacerse pasar por etéreas; ya saben, de esas que por ponerse lentes y cargar Diablo Guardián de Xavier Velasco, creen que se ven más listas, pero bueno, no estamos hablando de eso. Lo último de Delerium me parecía música para monjas techno, pero Lunascape se separa mucho de esa interpretación.

LunascapeInforme:
Un grave problema que encuentro en Lunascape, uno de muchos, es que resulta muy difícil definirlo en estilo, o incluso en un campo de estilos. Recuerdan a algunas estrellitas pop nacionales, que empiezan cantando boleros, para después entrarle al dance y luego sacar un disco de ranchero. Bueno, algo así, aunque mucho menos cínico pasa con Lunascape.
Es complicado saber si su negocio es el ambient-dance, el etéreo-étnico como en Delerium, un downtempo embarrado de trip-hop o el dutch-pop con matices de world music. Como dice su nombre, su personalidad como banda en un poco lunática.

Además, hay un conflicto de imagen. Las portadas de su 3 álbumes, fácilmente podrían ser confundidos con las muy comunes y ordinarias recopilaciones de chill-out o de algo muy cursi, como la espantosa portada del Innerside, donde Kyoko aparece como una Tinkerbell gótica, verdaderamente patético. Esto no me molesta, pero estoy seguro que comercializar una banda así, debe ser una pesadilla para el departamento de mercadotecnia de su disquera.
Aunque Kyoko en photo still parece un ángel, en sus videos se me figura más a un elfo con una mala cirugía facial, cosa que encuentro un poco perturbadora, por no decir intimidante.
Probablemente por pecularidades como estas, Lunascape no ha trascendido a pesar de tener buen potencial en un mercado del easy listening, donde siempre hay lugar para sexies y elegantes bandas girlie.

Para saber de qué hemos estado hablando, incluyo el corte Surrender, del más reciente álbum, Innerside, 2008. Además un vídeo en vivo de Mindstalking, su primer sencillo. Las vocales, aunque es una versión en vivo, suenan demasiado gorgorientas, pero consideren que así es el estilo, como a pujidos sexies; en compensación, los arreglos suenan más rocker que en la versión de estudio, sin mencionar que la Kyoko se ve... ¡hmpf!



Otros sencillos recomendados por la H. redacción de este e-zine son: Outside, Praise Me, Severed Heart y State of Mind.

El Dictamen de R+nR:
Como ya dije, si lo suyo es Xavier Velasco, lléguele a Lunascape. Ya, en serio. Lunascape está hecho a medida para fans del Lilith Fair Festival original (no tanto las versiones de los últimos años) y su fundadora, Sarah Mclachlan. También les cabe muy bien a feministas, ambientalistas y otros abraza árboles, así como para adoradores de la cultura escandinava o celta y fans de la música etérea pero que no les guste flagelarse tanto, muy recomendable para poperos que quieran subir un pasito en la escala evolutiva musical. Está claro, como los ojos de Kyoko en los que podría perderme por una eternidad... er, bueno.
Anexo al Dicatmen: Un enunciado que voy a repetir por lo menos un par de veces más al escribir este blog: ¡Ah que buenas están las Belgas! (y no me alburee, ya madure).

Lunascape es No-Rock.

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